Una trágica historia de amor
El pasado miércoles 29 de abril se llevó a cabo una emotiva ceremonia en la que Chase Smith y Sadie Mills (ambos de 18 años de edad) contrajeron matrimonio en presencia de sus familiares más cercanos. El motivo fue que a Chase le diagnosticaron un raro cáncer mortal que le dejaba poco tiempo para vivir.
Para muchas jóvenes parejas, el casarse es una decisión importante que afectará su futuro. Por lo que la planifican después de terminar sus estudios, viajar un poco y encontrar un trabajo para poder comenzar a pensar en formar un hogar estable.
De hecho, Chase Smith tenía esa mentalidad y planeaba comprometerse con su novia Sadie terminando la preparatoria y casarse con ella después de salir de la universidad. Sin embargo, comenzó a sentirse mal el año pasado y cuando acudió al doctor su mundo se sacudió por completo.
De acuerdo al diagnóstico, Chase padece de Sarcoma de Ewing, un tipo de cáncer agresivo que se presenta frecuentemente en los huesos y alrededor de ellos. Suele afectar en niños y adultos jóvenes y presenta dolores y fracturas en los huesos, inflamaciones y exceso de sensiblidad.
A Chase le descubrieron un tumor cerca del tubo bronquial izquierdo y en marzo de este año, su condición empeoró. Le aparecieron tumores también en un pulmón, en el hombro y el cerebro, por lo que los médicos le pronosticaron entre tres y cinco meses de vida.
Ante esta nueva realidad, el adolescente pensó seriamente en lo que quería hacer con el resto de sus días y tomó la decisión de casarse con el amor de su vida: Sadie Mills. La joven aceptó porque quería darle esa alegría a su novio y las familias de ambos respaldaron el evento.
Todos cooperaron para organizar la boda en 4 días y hacerla perfecta para la pareja, pidiendo a Dios de que ocurriera un milagro y que Chase Smith pudiera salvarse y vivir un largo tiempo con su nueva esposa y sus seres amados.
