“Un gran porcentaje de las mujeres que suelen recomendar medicamentos tienen secundaria trunca”, dice el Rector
Capital del Narcomenudeo, Ciudad Universitaria.- El Rector de la Máxima Casa de Estudios de nuestro país, la UNAM, el doctor Enrique Graue declaró esta mañana que se pronuncia totalmente en contra de que las mamás de los doctores se sientan con la libertad de recetar o recomendar medicamentos a sus conocidos.
Pero ¿Quiénes son “las mamás de los doctores”?
Según informó el rector se busca la identificación y captura de este supuesto doctor y su madre que han estado difundiendo videos en donde proyectan la idea de que cualquier mujer que haya engendrado a un doctor tendrá la facultad de recomendar medicamentos. Se hacen llamar “las mamás de los doctores”
El Rector Graue aseguró durante el baile de bienvenida que las mamás de los doctores y doctoras suelen ser muy metiches y creen que todo lo que han estudiado sus hijos se les transmitió en una especie de cordón umbilical inverso e invisible, lo que ellos llaman CUII. Además de aprovechó la oportunidad de recordarle a la población universitaria que toca el bajo en una banda de jazz los jueves en un Bar de Copilco.
“Aunque son mujeres muy chambeadoras un gran porcentaje de ellas tienen secundaria trunca.
Con la ayuda del Centro de Datos y Análisis de El Deforma, hemos determinado que el porcentaje de ‘Metichismo’ o ‘Metichés’ de las mamás de los doctores es el más elevado de todas las carreras.
Incluso podríamos creer que al ser tan entrometidas las madres, obligó a sus hijos a estudiar la carrera más demandante para estar lejos de sus progenitoras”, declaró el Rector.
El Rector terminó su conferencia explicando que un fenómeno igual pero en sentido contrario puede suceder cuando los hijos se creen con la capacidad de hacer lo que hace su padre aunque no tenga ningún tipo de capacitación más que la genética.
El ejemplo que citó el rector fue el del Referee de la Lucha Libre del CMLL “El Tirantes” y “El hijo del Tirantes” en la AAA donde ha fungido como luchador tornando dudosa su actividad de árbitro imparcial.
