La jerarquía futbolera siempre termina saliendo a flote
Olor a miarda rompemadres, Monterrey.- En un país libre uno puede hacer lo que le dé la gana; excepto claro, transgredir los derechos del prójimo. Esas son lecciones básicas de civismo y el mundo parece vivir bien con ellas:
Sin embargo, una vez que causas desmanes es difícil que la gente confíe en ti y por eso el pasado 10 de diciembre las autoridades del Estadio BBVA de Monterrey no dejaron pasar a Jonathan Llanes. Sin embargo, el logró colarse por la puerta de prensa y conoció a sus ídolos que festejaron en cancha ajena.
El problema empezó después, con la ardidéz del perdedor:
Cuando al aficionado de Tigres se le ocurrió la brilante y millenial idea de subir sus fotos a Twitter y el mundo se entero de su “fechoría” sin crímenes.
La Liga MX se puso a investigar el curioso suceso junto al ardidísimo Club de Futbol Monterrey y ayer revelaron que Iván del Ángel y Ramón Arévalo, reportero y fotógrafo de ESPN; así como otros cuatro reporteros más estarían vetados de cualquier actividad futbolera en México:
Ante este desatino, ya salió el propio aficionado a aclarar las cosas en un intento de que su cotorreo no se llevara a nadie entre las patas:
La Liga, la Federación Mexicana de Futbol y sobre todo el Monterrey se han abstenido de decir algo en relación a lo sucedido. El Deforma les envía este video para que se acuerden que lo que realmente importa:
Ánimo, todo se queda en la cancha. Seguimos siendo hermanos: aficionado Tigre consuela a su amigo Rayado. #INFO7
Detalles► https://t.co/E7qhUq6Dov pic.twitter.com/F7UILBCz2I— INFO7 (@info7mty) December 11, 2017