Lo bueno que ya le habían depositado el aguinaldo
Minas de carbón.- Un sujeto renunció a su trabajo luego de que su jefe le negara tomar sus vacaciones, y parece que no estamos interpretando bien la Ley Federal del Trabajo.
El ahora desempleado publicó su historia en Twitter en donde explicó la situación al tiempo que lanzó una encuesta sobre si debía o no renunciar.
Mi jefe me acaba de decir que 17 días de vacaciones son demasiado, que no puedo sino diez. Cabe acotar que como trabajo 7 días a la semana son solo 10 días continuos de vacaciones. Las vacaciones no las pagan, además… Un (1) like y renuncio.
— Luis (@Xere_Lac) December 20, 2021
“Mi jefe me acaba de decir que 17 días de vacaciones son demasiados, que no puedo sino diez, que como trabajo 7 días a la semana, solo son 10 días continuos de descanso”, escribió el joven en la red social volviendo viral su situación.
Para la empresa, las vacaciones son un “lujo”
El sujeto supuestamente venezolano explicó que no solo no le dejaron tomar sus días de descanso, sino que tampoco se los pagan, por lo que habrá que etiquetar a la autoridad competente para que le haga una auditoría aleatoria al lugar donde aquel trabajaba.
La encuesta en Twitter tenía la siguiente dinámica: “Me gusta” para renunciar, y RT para seguir ahí, pero con más de 120 mil reacciones de “Me gusta” por solo 5 mil retweets, la decisión estaba tomada, así que renunció.
Si bien muchos usuarios felicitaron su “valor” para renunciar, otros criticaron su postura de no intentar negociar las vacaciones sobre todo con la situación del desempleo que se vive en todo el mundo.
El joven pidió un like para saber si renunciaba o no a su trabajo y luego de que su historia se hizo viral, decidió decirle 'bye, bye' a su patrón.https://t.co/R0zqkBX6t5
— Cultura Colectiva (@CulturaColectiv) December 24, 2021
La verdad, es que haber notificado al equivalente venezolano de la junta de conciliación y arbitraje hubiera provocado que el jefe no solo le diera los 17 días que tenía de vacaciones, sino que se los pagara además, y la historia hubiera tenido un final mucho más feliz para el joven, quien hubiera vuelto a su cubículo a mediados de enero más descansado y con su cuenta de débito con más de 5 pesos en ella.
