Los chilangos han sido vegetarianos sin saberlo
La CeDeMeQuis.- Luego de largas horas de análisis de laboratorio, científicos norteños descubrieron que los bisteces y otras carnes de res que se venden en la Ciudad de México en realidad son puro cartón remojado, con un poco de colorante artificial.
“Ah, chirrión, pos con razón no me sabe a nada esta carnita, como que le falta alma al animalillo”, comentó don Gabino de la Garza y Garza, ilustre mexicano de Torreón, luego de probar unos bisteces en Iztapalapa.
Tras esta aseveración, los científicos decidieron investigar por qué diablos la carne que se vende en la CDMX no le llega ni a los talones a la carne que se vende en Aridoamérica (los estados del norte, pues).
¿Me estás diciendo que mis bisteces son un vil engaño?
La sorpresa fue que los bisteces chilangos son en realidad puro cartón remojado en aceite y saborizantes sintéticos, cortados de tal manera que simularan ser auténticos bisteces, aunque todo se trató de una cruel y dolorosa mentira.
En consecuencia, los chilangos han descubierto que, de manera involuntaria, forman parte de la comunidad vegetariana mundial. Por ello, algunos anhelan viajar a los estados del norte para probar un verdadero bistec bien asado como debe ser.
“Acá en mi barrio comemos cartón pensando que es carne, pero comemos tortillas chingonas, mientras que en el norte comen cartón pensando que son tortillas… una cosa por otra, carnal, Dios da y quita”, concluyó Brayan Osuna, mesoamericano avecindado en Tepito.