La vieja confiable
Establo de México.- El gobernador de aquel valle de sombras llamado Estado de México, Alfredo del Mazo, el tercero en su nombre, hijo del PRInosaurio, sobreviviente al meteorito, cliente del Banco de Andorra, príncipe del Museo de Cera, emprendedor de Huixquilucan y padre de 1,5 millones de Euros… decíamos que Del Mazo activó su modo “derretimiento espontáneo” para evitar ser investigado por la Justicia mexicana, europea y del mundo.
Antes de comenzar a fundir su contextura de cera y ser uno con el Universo, el gobernador del EdoMex aplicó un clásico, desgastado pero efectivo “rechazo categóricamente todo eso”, para rechazar categóricamente toda la tierra que le aventó El País en una escandalosa nota. Y todos sabemos que el adverbio “categóricamente”, en boca de los políticos, es una de sus desesperadas armas verbales cuando la cosa ya se puso muy fea:
Luego de lanzar este categórico tuit, Del Mazo se refugió en su oficina de Gobierno, abrió un pasadizo secreto jalando un chorizo de Toluca y se refugió en una misteriosa habitación blindada. “¡Activar modo derretimiento!”, exclamó Del Mazo y, en ese mismo instante, sus partículas de cera y sus moléculas maleables comenzaron a adquirir una consistencia de plástico derretido.
A las pocas horas, una gran plasta de cera derretida se expandió por todo el suelo de Toluca, haciéndose cada vez más delgada e imperceptible. Fuentes en Arial 12 confirman que el gobernador permanecerá con dicha naturaleza viscosa hasta que el escándalo se termine.
Por su parte, los abogados de este góber justificaron que esa lana la consiguió honradamente con una tarjeta del monedero rosa (que repartió en campaña).“En cuanto todo esto pase, volveremos a verter la cera de Del Mazo en un molde para que vuelva a su forma natural”, adelantó uno de sus abogados.
