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México.- Según el último comunicado de la Secretaría de Turismo dirigida por algún ex priista ahora en Morena, los pueblos chicos, mágicos o no, tienen como obligación nacional recibir a los turistas con amabilidad, ofrecer su comida local y además llevarlos a visitar el centro de la localidad.
Los centros de lugares muy pequeños deberán contener por lo menos una heladería, un kiosko entre viejo y no para que pueda posar la familia, y muchas palomas cruzando un cielo azul precioso.
“Ir al centro debe ser un lugar donde los turistas se sientan libres, se sientan entretenidos, se sientan menos aburridos o con ganas de estar en Facebook”, admitió gobernador local que vive lejos, muy lejos del centro.
Según datos de la revista Turista Internacional, miles de visitantes serán arrastrados por su familia para visitar pueblos diminutos donde todos se conocen y por ende te mirarán raro cuando seas turista, por lo que se exhorta a los viajantes a extremar precauciones y nunca, nunca nunca decir que eres “de México” para conseguir descuentos en cafés locales.