Lo políticamente correcto nos está destrozando
Springfield.- Para no parecer racistas, el equipo de producción de Los Simpson ha hecho un acto racista y ha confirmado que el dueño del Kwik-E-Mart ya no será parte de los próximos episodios de la familia más famosa y amarilla del mundo.
Según informan diversos medios gringos, por medidas políticamente correctas, la serie animada de televisión eliminará a uno de sus personajes más celebres, Apu Nahasapeemapetilon, quien se encargaba de surtirle la despensa a Marge y las cervezas a Homero.
Y es que el año pasado, Hari Kondabolu, quien quiera que sea este señor, tuvo la brillante idea de sacar un documental titulado “El problema con Apu”, en donde acusa a Los Simpson de normalizar el racismo y la discriminación, por lo que la producción del mundo amarillo a tomado esta terrible decisión que a más de uno nos duele en el corazón.
Algunos productores, como Adi Shankar, estaban en contra de que eliminaran al personaje y mostraron su descontentó al enterarse, por fuentes cercanas a Matt Groening, que la serie sólo abandonará a Apu sin dedicarle un digno homenaje.
“Si eres un programa que hace comentarios culturales y tienes demasiado miedo de comentar sobre la cultura, especialmente cuando se trata de un componente de la cultura que contribuiste a crear, entonces eres un programa sobre la cobardía”, mencionó Adi Shankar, quien por cierto también es de la India.
No cabe duda de que en Springfield le copian a México y obedecen a Donald Trump, pues han demostrado una verdadera intolerancia hacia los inmigrantes ya que han deportado al más grande de ellos.
Por su parte, el señor Fox trató de desmentir esto y respondió: “Apu apareció en el episodio ‘My Way or Highway to Heaven’ emitido el 14 de Octubre de este año”, lo cual es verdadero, pero el famoso migrante indio sólo apareció en una toma con personajes reunidos alrededor de Dios.
Desde El Deforma esperamos que no abandonen a Cletus Spuckler por normalizar la discriminación contra los Brayans, pues también es uno de los personajes que más amamos. ¡Cuántos más, arenosos, cuántos más!