“Se agotó el rosa mexicano, repetimos, no hay rosa mexicano”
Casa de Muñecas.- La nueva película Barbie protagonizada por Margot Robbie provocó una escasez mundial del color rosa en todo el mundo.
Para la esperada cinta de la directora Greta Gerwig, se quería dar la apariencia del set de muñecas característico de Barbie, de ahí que se haya asegurado que todo el “mundo” de la peli se viera de ese color, trayendo consigo efectos colaterales.
‘Barbie’ production designer reveals the movie used so much pink paint on set that it caused an international shortage. pic.twitter.com/OXpruiAAFJ
— Pop Base (@PopBase) June 2, 2023
Si no hay color rosa para la casa, culpa a la película Barbie
“Mantener la ‘infancia’ era primordial, quería que los rosas fueran muy brillantes y que todo fuera casi demasiado. No quería olvidar lo que me hizo amar a Barbie cuando era niña”, afirmó Gerwig para la revista Architectural Digest.
Fue tanta la necesidad del color “rosa brillante” que la marca de pintura profesional “Rosco” reportó una escasez a nivel mundial ya que no se dieron abasto con la demanda provocada por el filme.
“El rosa se convirtió en la tesis de la película. Fue épico tratar con los pintores, mezclar los colores correctos. Cuando llegamos a nuestra paleta, teníamos más de cien rosas, desde rosas púrpuras hasta rosas milenarias carnosas. Alcanzamos el punto óptimo en el medio, que son unos diez rosas”, explicó hace algunas semanas la diseñadora de producción.
this is definitely where i want to live as a parallel universe. barbie is everything he's just ken#Barbie #BarbieTheMovie pic.twitter.com/gO3TTaVeYF
— 𓄂вϋѕ̧яα ♕︎ нувяι∂ кєи αи∂ ναмριяє вαявιє (@barbiehybridken) May 25, 2023
“El mundo se quedó sin rosa”, agrega riendo la directora sin sospechar que un día la pagará con papel higiénico.
La cinta tiene lugar en las montañas de San Jacinto en California, justo como eran los escenarios de la década de los 60, cuando la muñeca empezó a popularizarse con sus set que estaban precisamente adornados con el color rosa por todos lados.
“Todo tenía que ser táctil, porque los juguetes son, ante todo, cosas que se tocan”, comentó la cineasta que se apoyó de la diseñadora de producción Sarah Greenwood para crear “el mundo de Barbie” sin importarle si dejaba al mundo sin pintura vinílica.