Lo siento pero así es como el Señor lo hubiera querido
México.- Para todos los dueños poblanos de perros poblanos que crean firmemente en el poder de la familia y las buenas costumbres, se les hizo un llamado contra la promiscuidad canina para prohibir el olfateo de cola y el enroscamiento de correas sin antes haber firmado la carta del sagrado matrimonio… en Puebla.
Pese a que los perros no prometen fidelidad pues no creen en Dios, ni en las reglas de los hombres, miles de dueños se han visto en la necesidad de crear un registro civil en Puebla para perritos con la finalidad de poner a todos estos pervertidos bajo un serio reglamento.
“Algunos creerían que esto es absurdo. Pero ¿sabes quién cree que es lo justo? El de arriba”, argumentó un poblano promedio con un rosario de madera decorando el escote de su camisa Polo.
Este tipo de impedimento para el libertinaje de los perros ha traído un sin fin de problemas a la gente de Puebla, ya que un perro entre la edad de 5 meses a 5 años se ve en la necesidad de oler tanta cola se le aparezca en frente, por lo que han existido casos de 10 matrimonios perrito en un día con un solo french.
Aquí la imagen de un pervertido
¿En qué consiste la olida de cola y el matrimonio canino en Puebla?
Tener un contacto más allá del “buenas” para ir y venir en la calle se considera acto sexual en Puebla, una de las poblaciones más conservadoras y apegadas a diosito de toda la República, por lo que se debe regular y vigilar todo acercamiento a las partes de bajas de cualquier criatura.
Algunos expertos afirman que este tipo de dinámicas mochas afectan a los perros a nivel psicológico, sin embargo, también se descubrió que la psicología canina es un engaño, y que todo lo que concierne a perritos es “sácame a pasear, no me pegues, aliméntame y déjame oler colitas”.