‘Yo no como ningún yogurt mas que el jocoque mexicano’, exclamó Aquiles
La llegada del yogurt mexicano ha puesto de cabeza a toda la población griega. Y es que el sabor de dicho producto ha hecho que los grecos desprecien lo que venían acostumbrados a comer, que era un lácteo sabor natural con fruta seca por debajo, nada comparado con el yogurt líquido que acostumbran en México y que acaba de llegar a Creta.
‘Ya no quiero tomar nada que no sea el mexicano‘, expresó un filósofo callejero de Tebas.
Ha sido tanta la fascinación por la cultura mexicana, que Academias espartanas ofertarán el programa para aprender a luchar como caballero águila, además que se producirán películas de la cultura maya.
‘Netzahualcóyotl era un gran pensador’, dirán los habitantes de Atenas con admiración mientras degustan el platillo antípoda.
El producto que parece como leche de vaca pero con color de agua de horchata con fresa, ha enloquecido a los habitantes de Micenas.
‘Es lo más trascendental que ha pasado por aquí desde que el apóstol Pablo anduvo por estos lares’, reconocieron los tesalonisenses.
Aunque hay algunos pobladores que se niegan a aceptar que adoran el jocoque mexicano, en realidad es por un nacionalismo hueco que no les permite disfrutar el lácteo de importación.
