Cuando te vuelves madre y abuela en un mismo parto
El tren del mame.- Mientras tú todavía andas reflexionando profundamente sobre cuántos hijos o perrhijos quieres tener y a qué edad sería bueno, allá en Colombia van un paso más adelantados que nosotros y los bebés ya nacen embarazados.
Esto sucedió en la ciudad de Barranquilla, y el caso dejó sorprendidos a los médicos, pues se trata de algo que ocurre una vez en un millón de embarazos. Se trata de Mónica Vega, mujer que estaba esperando a su tercera bendición, quien habría de llamarse Itzamara.
Al séptimo mes de su embarazo, y tras realizarse una ecografía, la mamá y los médicos descubrieron que la bendición, a su vez, tenía otra bendición. O sea que su hija, que aún no nacía, ya estaba embarazada también.
Y, sí, sabemos que esto suena a meme del Conalep, pero en esta ocasión sí es verdad. Este fenómeno es una alteración en el desarrollo embrionario, y a ello se le conoce como “gemelo parásito” o “fetus in fetu”. Y lo que en realidad sucede es que las células de los futuros hermanos gemelos no se dividen a tiempo y los embriones crecen asimétricamente.
Pero lo más impresionante fue que, desde el embarazo, los médicos advirtieron que la bebé “estaba embarazada” de su hermana; pues por lo regular este fenómeno se descubre cuando el bebé ya nació e incluso cuando ya creció un poco más.
El cirujano que atendió el caso dijo que le practicó una cesárea a Mónica, y posteriormente le practicó otra “cesárea” a la recién nacida Itzamara para sacarle a su “bendición” del vientre y evitar que le creciera más y pusiera en riesgo su vida.
Y aquí es donde los anti-abortistas extremos se van a enojar e indignar, pues resulta que el cirujano lo que básicamente realizó fue practicarle una “interrupción del embarazo” a la bebé Itzamara, pues el pequeño feto que se alojaba en el vientre de la recién nacida no podía seguir desarrollándose, además de que carecía de cerebro y corazón.
Por fortuna, todo salió muy bien para Itzamara y para sus padres. Y todo parece indicar que crecerá feliz, bailando cumbias y, quizás en el futuro, asombre a sus amiguitos contándoles que ella se embarazo desde antes de nacer.