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Bondojito.- La vida se va en un abrir y cerrar de ojos, que es más o menos lo que dura el transborde de La Raza o Atlalilco. El Metro, la institución por excelencia de nuestra clase obrera, es un dios bondados que puede dañarnos en la espina más ínfima de nuestra voluntad, el mexicano puede perder de 2 a 4 horas diarias aquí en lo que va y viene todos los días de su vida. Qué lindo.
No se puede esperar menos de la calidad de vida y tolerancia de los ciudadanos de la CDMX y de toda la Caravana migrante del Estado de México, por eso cuando la cuenta oficial del Metro otra falla de mantenimiento sabemos que no va a durar siete minutos, se va a llevar lo poco que nos queda de esperanza.
#AvisoMetro: Se desalojó tren para revisión en mecanismo de conducción en #L3. El tiempo de atención fue de 7 minutos. Al momento la marcha es continua.
— MetroCDMX (@MetroCDMX) 14 de marzo de 2019
Y fue en este mismo tuit que la voz de la furia (y del infortunio) se hizo presente. No solo fue el público promedio general consternado por las mentiras, el becario, muy probablemente ya relegado desus cargos, del sitio de deportes de TV Azteca no pudo acallar el grito revolucionario de su alma y anunció lo harto que está del pinche sistema retrógrada que se cree la gran berga.
El comentario desapareció pero no las capturas de pantalla. El momento tal cual ave fénix en el horizonte, fue visto por unos pocos que ya lo recuerden más como un sueño que como algo real. La oportunidad de ver la vida se abrió paso ante la llegada de la muerte, sí, por la tremenda regañiza y jalada de pies que le debieron haber dado al bendito becario que, martir por accidente, dice lo que todos queremos decirle al holgazán bot que representa la cuenta del metro.