“¡Qué bueno que no se construyó el aeropuerto!”
Paseo del CDmeco.- Ante la medieval situación que están viviendo los capitalinos de no tener agua potable para lavar las cocheras de sus casas, un grupo de visionarios han decidido irse a asear en el lugar donde se estaba construyendo el aeropuerto de Texcoco y que gracias a intervención de un mesías, fue rescatado, y ahora fluyen a través de él, aguas cristalinas y manantiales que permiten que los capitalinos puedan chapotear felices.
“No sabía qué hacer, pero de pronto recordé que está el lago donde querían construir un aeropuerto que nunca iba a usar”, señaló una jefa de manzana en Iztapalapa.
Largas filas de camiones pueden verse en las inmediaciones de las ruinas del aeropuerto, pues la noticia de que pueden bañarse en las ciénagas de Texcoco ha corrido como pólvora.
Además del baño, muchos chilangos están aprovechando la situación para rellenar sus garrafones de agua y llevarlos de regreso a su casa donde serán usados para bañarse a jícarazos.
Aunque la situación está aún controlada, hay temores de desbordamiento en caso de que el desabasto del vital líquido siga, lo que podría secar el lago para siempre, permitiendo así la construcción de algún parque de diversiones o bien, que se erija en medio de lo que era la laguna, un nuevo guerrero chimalli, todo en caso de que 100 personas voten a favor de él.
Las autoridades están regulando el tiempo que las personas pueden permanecer dentro del lago con la intención de que no sea usado como alberca, sino estrictamente para aseo personal, pero a pesar de lo anterior, ya se han podido ver restos flotantes de bañistas que duraron de más dentro del lago.