Desde tostarse en la azotea hasta conocer las estrellas en provincia
La CeDeMequis.- Nunca nadie se ha explicado la razón por la que, el niñito Dios, que apenas nació hace tres meses, ahora será crucificado en Iztapalapa por unos soldados chilangos-romanos bien malotes que quieren darle de latigazos y maltratarlo ante una gran oleada de espectadores que sufren junto con Cristo.
Pero lo que sí sabemos es que este acontecimiento es tan importante que nos dan vacaciones, seamos o no católicos. Incluso los de la religión atea se convierten al catolicismo con tal de disfrutar unas sabrosas vacaciones de Semana Santa.
En el caso de los chilangos, se ha comprobado que tienen unas costumbres muy particulares durante este periodo. Todo depende de si salen o no salen de casa, o sea, de si tienen o no tienen dinero. De cualquier modo, sus hábitos de Semana Santa se pueden catalogar en estos doce puntos principalmente. Veamos: