“Si del cielo te caen tamales, aprende a hacer guajolotas”
La CeDeMequis.- En el transcurso de sus ajetreadas vidas, los chilangos han tenido que aprender a sobrevivir a diferentes eventos e interminables batallas: luchan por ver las estrellas, por hacer que el resto del país acepte las quesadillas sin queso, por caber en el transporte público, por tener un dinero ahorrado y conocer el mar. En fin, la vida del chilango es una constante lucha.
Estos cotidianos disturbios han hecho que su sabiduría chilanga sea su principal herramienta para sobrevivir. En pocas palabras, deben ponerse truchas en todas sus actividades o, si no, se les retiraría su credencial de chilangos y sin ella no podrían comer quesadillas sin queso ni tortas de tamal.
Por eso, para aligerar sus actividades diarias, hemos actualizado un par de dichos populares en una versión chilanga. Cada refrán contiene una enseñanza o una advertencia que ha llevado siglos en sintetizarla en tan pocas palabras. Veamos:
1. Vendedor que se duerme, se lo lleva la patrulla
2. No le pidas queso a las quesadillas chilangas
3. Más pronto cae un hablador si hay socavón
4. Todo cabe en un vagón sabiéndolo acomodar
5. Más vale celular en mano que cientos robados
6. El que nace para ñero del cielo le cae la estopa
7. Al buen entendedor, pocos albures.
8. Más sabe el tepiteño por viejo que por tepiteño.
9. El Metrobús aprieta, pero no ahorca
10. Si del cielo te caen tamales, aprende a hacer guajolotas