Porque el rosa vulnera su fuerte masculinidad
Ciudad de México. – Luego de pasar meses en silencio y con una lucha interior que lo devoraba, Luis Trejo, taxista de 52 años, decidió mostrar su descontento con el color para los taxis impuesto por el gobierno de la Ciudad de México.
Pudimos entrevistar al señor Luis Trejo en su coche y ahí nos explicó el asunto “Es que no entiendo, primero Über y ¿ahora nos hacen esto? Con lo bueno que eran los taxis de antaño con su verde y blanco, hasta los color dorado con rojo eran muy padres, yo les decía a las chavas que el taxi estaba hecho de oro, ya sabes para sacarles una sonrisita. Ah pues no, ahora los taxis son rosa con blanco como si yo fuera un pinche puto”, el señor Trejo también nos contó que le daba mucha vergüenza, pero que nos tenía que cobrar el tiempo de la entrevista porque había encendido el taxímetro desde el momento en el que nos subimos a su coche.
Porque el color rosa pone en jaque a una gran parte de la población masculina
También tuvimos contacto con la OTH, Organización de Taxista Homofóbicos, quienes expresaron su descontento a través de su vocero Pedro García “Estamos hartos de usar esos colores en nuestros taxis ¿Qué viene después? ¿Usar faldas? ¿Quitarnos el bigote? ¿Abandonar nuestra tóxica masculinidad mientras nos hacemos concientes que el machismo afecta a nuestra sociedad? ¿No modificar nuestros taximetros? pues no, le decimos que no a esos colores jotos y esperamos el gobierno tome acciones al respecto”, señaló García justo después de contarnos que también están buscando unas nuevas siglas para su ONG ya que los confunden con la Organización de Taxistas Homosexuales.
