“Hay que irlos pensando porque luego nos agarran las prisas con las uvas”, arengó una doñita supersticiosa
Vid de los deseos.- Con la finalidad de que no les agarren las prisas, las personas ya están meditando sobre los propósitos que no van a cumplir el próximo año.
Como cada año, las personas suelen proponerse cambios en su vida para el año que comienza, y aunque éstos rara vez se materializan, sirven para darle sentido a la ingesta de uvas durante la cena de Año Nuevo.
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— español everywhere!® (@espanolew) December 23, 2024
Se deben hacer el propósito de pensar antes en los propósitos
Es así que para este año, la gente aprovechará estos extraños días entre Navidad y fin de semana para pensar seriamente qué quieren hacer de sus vidas, y por ende, qué cambios deberían proponerse hacer.
“A ver, lo del gimnasio no funcionó porque en enero hace frío en las mañanas, pero sí puedo intentar dejar de comer galletas, al menos entre semana”, valoró un vato con grandes planes para este 2025.
Lo ideal es que aquellos que verán el calendario gregoriano como una oportunidad para renacer tengan pensando previamente de 15 a 20 propósitos que puedan recordar mientras se meten las uvas a toda velocidad.
“Y quiero aprender karate, y a llevarme mejor con los vecinos, y retomar las clases de japonés, y voy a empezar a hacer punto de cruz…”, deseará velozmente una doñita que realmente pensó en seguir las campanadas de medianoche con deseos viables.
Y para estar al día: unos influencers llegaron a un restaurante exigiendo comida gratis y el dueño les sirvió pan y agua.
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