Hay talento, sólo falta apoyarlo
México Mágico.- Francisco Orihuela, mejor conocido como “el joven de las empanadas“, ha regresado al mundo del Internet y ahora dará clases de marketing en TikTok, para que vayas aprendiendo a vender que buena falta te hace.
Fue en el año 2016 cuando “el mejor vendedor de empanadas del mundo” se volvió viral en el Internet, pues su carismática forma de vender su producto cautivó a más de un turista en Acapulco.
Vamos con un recuerdo:
El poder de convencimiento de Paco, quien en hace unos años era tan sólo un morrito acapulqueño, dio de qué hablar en todo el mundo, ya que demostró que la edad no es un impedimento para tener la mejor actitud y ser un maestro del marketing.
Además, este joven prodigio de las ventas, habla varios idiomas, lo que le permitió venderles sus empanadas a diversos turistas. ¿Hay algo que este joven no haga bien?
Acá otro recuerdo:
El joven de las empanadas en el 2020
Y ahora, después de cuatro años de volverse súper famoso mundialmente, Paco Orihuela realizó su primera publicación en TikTok, en donde aseguró que ofrecerá contenidos sobre historia, marketing y otros temas interesantes.
“Mis tiktoks no van a ser de payasadas; no voy a bailar. Vamos a hablar de ventas, marketing, historia. Tiktoks de utilidad”, confirmó, para que te vayas preparando para los tiktoks más aburridos del mundo.
Acá su anunció en la plataforma:
el 2020 no para: el morro de las empanas ha vuelto y ahora amenaza con dar clases de marketing en TikTok pic.twitter.com/rGH2EyIzbB
— Eric Sánchez Snowball (@ericssnowball) September 2, 2020
El joven de las empanadas aseguró que ya tiene 19 años de edad, y que por ello está buscando asesoría legal para denunciar a las personas que están usurpando su identidad. Pero a él lo puedes encontrar en TikTok como @pacoeldelasempanadas, para que vayas a seguirlo y te conviertas en una promesa del marketing.
Por su parte, la hermana mayor del joven de la empanadas, La Mars, aún no ha hecho nada productivo con su vida.
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Seguiremos informando, o no, mejor sí, ya no sé.
