El CrossFit siempre haciendo sufrir a todos
Cancelópolis – El empresario del fitness y creador del concepto del CrossFit, Greg Glassman, es la última figura pública en ser cancelada por el Internet y de paso por sus patrocinadores. Y todo por un mal chiste sobre las protestas del movimiento #BlackLiveMatters.
Todo comenzó cuando un instituto de datos para la salud de la Universidad de Washington publicó que “el racismo es un asunto de salud pública”. A Glassman se le ocurrió que sería el mejor momento para hacer un chiste y dijo “FLOYD-19“. Esto en alusión a George Floyd, cuyo asesinato a manos de un policía dio origen a las protestas.
También llamó a uno de sus afiliados “delirante” por cuestionarlo sobre el silencio de la empresa CrossFit frente al movimiento.
El Internet no perdona y los patrocinadores menos
Por si no lo sabían, ese mame del CrossFit en realidad es una franquicia. Así como los OXXO o el Liru Sisa. Es un programa de entrenamiento y tú como gimnasio pagas por usar su nombre y su método. Esto obviamente lo ha convertido en un negocio multimillonario porque ya hasta en tu colonia hay una de esas madres.
Pero los comentarios le salieron caros, porque a raíz de su chiste más de 227 centros deportivos se han distanciado de la empresa madre. Algunos de ellos dijeron que ya no renovarán su suscripción anual y donarán el costo (unos 60 mil pesos más o menos) a caridades relacionadas con el #BlackLivesMatter.
También Adidas ya anunció que nel, que bye, que ya no quieren nada con esa gente. Lo mismo hicieron algunos influencers de la marca como esta morra de acá abajo.
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¿Y qué hizo Glassman? Ya salió a disculparse porque el incentivo más grande para dejar de ser racista es el dinero, aparentemente. En su disculpa el vato dijo que en realidad lo que él criticaba eran las medidas de contención y la cuarentena. No tiene mucho sentido, pero eso dijo que dijo.
Así las cosas con el mundo de los m*m*dos.
