No cabe duda que era un genio
CDMX.- Investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia, en colaboración con la Universidad de Chapingo, encontraron los vestigios de la primer torta de tamal en una vecindad abandonada del Barrio de La Merced, en la Ciudad de México. El hallazgo reveló que el creador intelectual de la obra gastronómica es el músico y compositor británico, ya fallecido, David Bowie.
“Luego de una peligrosa expedición que nos llevó por los rincones más insalubres de la chilangocracia, por fin dimos con la primer torta de tamal, que data de 1967”, comentó “El Mosh”, director de la U. de Chapingo. Tras analizar los componentes y el ADN de la torta ya fosilizada, descubrieron que las huellas dactilares impregnadas en el bolillo coinciden con las del compositor de “Ziggy Stardust“.
Para indagar más, los investigadores se sumergieron en los archivos de la Hemeroteca Nacional. Ahí, dieron con una vieja fotografía tomada en 1967 en una fonda de La Merced, en la cual se puede ver a Bowie ingiriendo la que probablemente fue la primer guajolota de la historia.
David Bowie, músico, poeta, genio… ¿inventor de la torta de tamal?
A pesar de estas pruebas, diversas dudas asaltaron al equipo de investigadores: ¿Bowie la inventó o solo la probó? ¿Si él fue el inventor, por qué se comió sólo la mitad de la torta? Para acabar de una vez con las dudas, dieron un último recorrido, esta vez por la Fonoteca Nacional. Ahí encontraron la pieza final del rompecabezas.
“Como es bien sabido, Bowie vino a México en 1967 a buscar sonidos que inspirarían su primer álbum, por lo que grabó todas sus actividades con un equipo rudimentario”, nos cuenta Jonathan Castro, director de la Fonoteca. “Una de esas grabaciones quedó en México y afortunadamente tenemos las palabras que prueba que David Bowie inventó la torta de tamal”, indica.
Aquí la transcripción de la mítica conversación que derivó en este platillo endémico de la Ciudad de México.
