En la UNAM es donde Lucía Riojas tomará el taller remedial de forjado.
Las islas – Luego de que la diputada independiente Lucía Riojas le regalara un churro de mota a Olga Sánchez Cordero, muchas voces se alzaron en contra de la diputada. No por andar de marihuana, sino porque el churro no estaba tan bien armado.
“A ese churro le sobra demasiado papel y está desproporcionado, mejor le hubiera dado un pipazo”, aseguró José Luis González González, un marihuano local y experto en churros consultado por el Deforma.
Todos somos Lucía Rojas pic.twitter.com/nh01jvhgiG
— Token Terán (@TokenTeran) October 10, 2019
Debido a la rechifla popular del Pueblo Bueno, la diputada sería obligada a tomar cursos de regularización en forjado de churros para mejorar su técnica. Evidentemente, esto sucederá en las instalaciones de la UNAM.
Recordemos que la UNAM cuenta con un Instituto de Investigaciones Canábicas en donde decenas de pachecos se dedican de tiempo completo a encontrar las diferentes y mejores formas de armar el chubi. Los mejores y más marihuanos de la UNAM, en un proceso más selectivo que el examen de admisión, son reclutados para llevar el ancestral arte de la droga al siguiente nivel.
¿Ese edificio que creías que era una chimenea por su constante humareda? Ahí es el instituto donde Riojas se verá obligada a tomar el taller remedial de forjado. De acuerdo con el plan de estudios facilitado a este medio, deberá cubrir conceptos básicos como consistencia, textura y administración de la babita para sellarlo. Además aprenderá cómo convertir cualquier objeto de la vida cotidiana en una pipa, tales como zanahorias, limones o conchas de pan dulce.
“Consideramos que la entrega de ese churro fue un acto político heroico y de vital importancia para el desarrollo del país, pero también que fue un desempeño vergonzoso”, aseguró Jesús de la Luz Ramírez, el director del Instituto de Investigaciones Canábicas, quien aseguró que, a pesar de todo, por supuesto que se lo fumaría.
