Huele a patas
Hollyweed.- Si creciste en los noventa y te gustaban las películas de Quentin Tarantino, seguro eras el tipo más cool de tu escuela, de tu barrio y de la galaxia. En aquellos ayeres solo las mentes elevadas te hablaban de “Tiempos Violentos” o “Perros de reserva”.
Pero ahora las cosas han cambiado. Tarantino pasó de ser un tipo chido a volverse un viejo, en palabras de lo millennials, “caguengue y nalgas miadas”. Y es que la violencia y los diálogos del director ya no resultan del agrado de las nuevas generaciones para quien Bad Bunny es un héroe revolucionario.
Afortunadamente, Tarantulino está de vuelta con “Érase una vez en Hollywood“, que nos ofrece más de lo mismo en su obra. Por ello te preparamos estas sencillas características para saber que estás viendo una película de este man y te alejes o agasajes, lo que tú prefieras.
Hay muchas tomas de patas
Suele meter la cámara en la cajuela
Es protagonizada por alguien que fue ídolo hace dos décadas y ahora se encuentra en la decadencia
Diálogos picositos
Más tomas de patas
Música chidori
Baños de sangre, negros asesinados y caras destrozadas
Es el único director que le da chamba a Michael Madsen o Tim Roth
Ah sí, más patas
Lo más importante: en los créditos debe decir lo siguiente
