Nunca es tarde para salvar la Semana Santa
Llegaron las vacaciones. Ese tiempo sagrado que todos aprovechan para irse a echar un regaderazo a Acapulco o Tepetongo con la familia. Esa época en la que la ciudad de vacía y el tedio se apodera de los que se quedaron. Tal vez no lo sepas, pero existen miles de morros que, como tú, tienen que soportar este perro calorón sin mucho qué hacer en la casa (y muchas veces sin un peso).
Es entonces cuando la fiera fiestera que llevas adentro se ve obligada a despertar, convocar a tus secuaces y armar un cotorreo nivel Dios que ya quisieran aquellos que se fueron a la playa. Cuando logras convocar este tipo de encuentros, sabes que no necesitarás vacaciones el resto de tu vida.
Es por ello que el Escuadrón del Perro del Deforma te comparte estos mágicos consejos para que armes la vacación entre tus compas sin necesidad de irte tan lejos. Anótale sin pena y ejecútale:
Junta a tus carnales y carnalas de confianza, lo más importante para pasarla bien es estar con gente que esté a la altura del cotorreo.
Busca un buen spot para juntar a la tripulación, puede ser la azotea de tu casa o, en su defecto, un terreno baldío.
Pídele una bocina a tu vecino para conectar tu celular. O de perdis usa dos vasos rojos para amplificar el sonido.
Junta todas las cubetas que puedas encontrar para que la banda se siente.
Ármate una playlist con puro flow de ese que te despierta las ganas de darle duro contra la pared.
Consulta buenos tutoriales para armar el drink más perrón, ya sabes, ese que se robará la noche.
Olvídate de los aburridos globos, consigue estas pulseras neón para ponerle color a tu sana convivencia. Seguro tu prima tiene unas.
Si entra el hambre, no olvides armar la vaquera y lanzarse por los chicharrones de a un kilo por 30 pesos.
Y lo más importante: recuerda que esto no acaba hasta que el último soldado se va.