Noche de paz, ¿noche de amor?
Mi México Mágico.- Todos escuchamos historias de cadáveres dejados a media Neza, disparos en Obrero Mundial, robos en las cloacas de Tacubaya o asaltos a plena luz del día en la Narvarte, pero nunca nada como esto.
Durante el intransigente periodo de incertidumbre económica y social, miles de mexicanos han formado de esa cifra anual como víctimas de asaltos y robos de todo tipo. Los delitos y la ira en la CDMX han ido en aumento ante la salida de Miguel Ángel, reprimo como puerco, Mancera y el ascenso de Claudia, haré como que no ví a los niños debajo de la escuela, Sheinbaum. Una ciudad que vive un díficil momento de descontento.
Pero nada nos ha impactado tanto como esto. En inmediaciones de la Ciudad de México, una foto fue subida como cólera de un delito que no cualquiera se atrevería a hacer. Hay casos de secuestro, robos, homicidios o faltas a la moral como ponerle gomitas a la cerveza, pero nadie osó robarse a un Niño Dios.
La imagen subida a redes sociales muestra un cartel con un nacimiento de fondo, presumiblemente el lugar común de la colonia. En el podemos ver un mensaje de suma indignación por la desaparición de la pieza de yeso más importante de la navidad. Yisas Kid, como se le conoce en México, ha sido objeto del escarnio público, desde el Pasito perrón, hasta su múltiple gusto por ser Drag Queen y últimamente con su versión morenística de AMLO.
La noticia revoló en los rincones shitposteros de actualidad, cuna del meme mexicano, pero no se ha dado respuesta, esperanza o colación a esta localidad que padece la ausencia de su niño dios. Desde esta redacción exhortamos al bien común. Fuentes de aguinaldo reportan que la foto es montada debido a que el Niño Dios solo se pone en mera Noche Buena. Fuentes adictas a este editor confirman que el Niño Dios no estaba hecho de yeso, sino de deliciosa cocaína muy bien compactada.
