Dale tu bebé el trato que se merece
Enseñarle a tu bebé a usar el arenero del gato puede ser algo complicado pero tiene muchos beneficios. En primer lugar, te evita la pena de tener que ver sus heces tres veces al día, además de eliminar los olores más molestos.
Por otra parte, el bebé desarrollará el sentido de la urgencia y la responsabilidad, además de enseñarse a no cagar donde no debe.
Sigue el proceso de entrenamiento de forma precisa y prepárate para experimentar pequeños contratiempos.
1. Designa un lugar para la gatera de tu bebé
El primer paso es designar una zona de la casa donde el bebé haga sus necesidades. Elige un cuarto o una sala a la que pueda acceder fácilmente.
2. Acostumbra a tu bebé
Necesitas entrenar a tu bebé para que use el arenero gradualmente. Para ello, puedes utilizar un asiento de entrenamiento, lo venden en el OXXO.
3. Retira el asiento de vez en cuando
Una vez que tu bebé identifique el asiento, retira este de vez en cuando para que identifique al arenero como su nuevo lugar especial.
4. Si no tapa su popó, golpéalo
Debe enseñarse a tapar sus necesidades. Cada que no lo haga, colócale un buen zape en la zona baja de la nuca. Recuerda que siempre es mejor un coscorrón a tiempo que tener que ir a visitarlo al anexo.
5. Cámbiale la arena cada cinco días
Una vez que la arena se torne grisácea, recuerda cambiarla y desinfectar el arenero. Después de algunos años, deberá aprender a hacerlo por sí mismo.