Tema serio
México.- Juan Pérez (o, como algunos lo han llamado, “El Cochinote”) es un individuo de veintitantos años, y desde hace un mes ha permanecido encerrado en su departamento sin querer abrir la puerta por temor a que sean gemidos.
En entrevista telefónica para El Deforma, confesó: “Ya caí muchas veces en ese estúpido juego de los gemidos, mis vecinos piensan que soy un perverso que se la pasa viendo XVideos, y… bueno… sí veo XVideos, pero con audífonos y sin molestar a nadie (más que al ganso, obvio). La cosa es que todos me tildan de perverso porque he abierto videos donde suenan gemidos”, expresó.
Este joven se niega a volver a abrir su puerta, de hecho, quiere no abrir ninguna cosa más, así de grande es su trauma. “Primero me pasó en Facebook, luego en Twitter, ahora me pasa en todos lados: abro un cajón y salen gemidos, abro una lata de atún y salen gemidos, abro un libro y salen gemidos… incluso abro mi corazón y salen gemidos”, explicó llorando el joven.
Durante este mes, lo han visitado vendedores de Avón, testigos de Jehová, vendedores de Total Play, y todos los candidatos independientes, pero él se ha negado a recibirlos: “No me voy a arriesgar a que esas personas sean más gemidos que personas… sobre todo con los candidatos independientes que se la pasan gimiendo y llorando en este valle de lágrimas llamado Pre-Campaña Electoral”.
Psiquiatras afirman que este sujeto presenta un severo cuadro de estrés postraumático. Y que sólo se curaría si llegara a medicarse, cosa que no va a pasar porque para medicarse necesitaría abrir el frasquito de medicina, y quizás sean gemidos lo que encuentre en el interior.