Fue una broma cruel de los dioses
Club Pompeya.- El fin de semana pasado se llevó a cabo la Convención Anual de personas Griegas en México, con el motivo de unir ambas culturas en una celebración solemne con tequila, una buena copa de vino, orgías homo eróticas y demás festividades casi no católicas.
Lamentablemente el organizador principal de dicha convención atravesó por una serie de adversidades que impidieron que la convención transcurriera con normalidad, así lo afirmó uno de los voceros del evento.
Episodio I
“Al principio todo estaba saliendo bien, pero nos faltaban 43 servilletas y Jasón Negrete, el organizador, fue a comprarlas al oxxo con una comitiva que viajó en uber a tres cuadras de la convención” comentó Homero Papanicolaus Goicochea, vocero oficial del evento quien narró la tragedia.
Pero las cosas se comenzaron a complicar cuando no encontraron su marca favorita las “Servillocinas de Oro” y tuvieron que viajar al costco por ellas y ya de perdida un paquete de esas finas frituras y cacahuates que solamente se puede comprar alguien en quincena o con el dinero del patrón.
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Episodio II
El panorama se dificultó debido a que ninguno de los ubernautas tenía la membresía para entrar al recinto. Así que esperaron en la entrada y tras varios intentos por ingresar descubrieron que la mejor forma para ir a comprar sin pagar la membresía, era pidiendo prestada la tarjeta de alguien más (como en el metrobús) y así vencer al sistema financiero retrógrada de mierda, desde dentro.
Episodio III
Ahí conocieron a una señora de las lomas llamada Helena, residente de la calle “Fuente de Troya” en lomas de Tecamachalco, de quien Jasón se enamoró perdidamente hasta que supo su edad y pensó que podría ser su madre. Pero gracias a ella pudieron entrar con su tarjeta y poder pagar las servillocinas, los cacahuates y un 12 de chelas bien frío para la sed.
Episodio IV
El objetivo se había cumplido, pero lejos de celebrar, los ubernautas se desesperaron porque el auto que los llevó ya estaba cargando otros pasajeros y a pesar de las protestas el chofer del sofisticado vento 2012 se justificó cerrando terminando el viaje y se alejó de ellos para siempre, no sin antes recibir una terrible calificación, tres estrellas.
Episodio V
Durante la larga caminata de regreso al centro de convenciones, varios tripulantes del antiguo uber desistieron en regresar y se fueron a sus casas o se detuvieron en puestos de tacos de carnitas y de guisado para comer algo, mientras que otros eran asaltados por poderosos atlantistas y americanistas de 1.60m de estatura con escuadras de juguete. Pero Jasón Negrete, coordinador del evento siguió adelante con su misión, evitar que los asistentes utilizaran papel higiénico en ligar de servilletas.
Éxodo
Después de una larga espera de 25 minutos, los asistentes de la convención presenciaron como Jasón regresaba con las servillocinas de oro y entre gritos de ánimo celebraron el épico regreso del coordinador quien entregó con su último aliento el paquete a los invitados, mientras caía fulminado por todas las cervezas que bebió en el camino.
Pero su esfuerzo fue inútil, ya que habían sustituido las servilletas por papel estraza y Jasón fue relegado a cadenero para la convención del próximo año por comprar alcohol y botana fuera del presupuesto y en horario de trabajo.
En cuanto al evento todo transcurrió de manera normal hasta que un comando armado asesinó a 17 personas a sangre fría, en un ajuste de cuentas entre la mafia y la policía federal, pero esa ya es otra historia.
