De la promoción 2×1 hasta el paquete familiar en funerarias
México.- Los volantes o flyers constituyen una de las estrategias de publicidad más antiguas y menos creativas de todas, pero también es de las más baratas y es por ello que todos los negocios acceden a este tipo de formato.
Ya sea una pollería, recauderia, paletería, consultorio dental, gimnasio o concesionaria de autos, estos molestos trozos de papel llegarán sin ninguna explicación a nuestras manos y se irán de la misma manera en forma de basura con todo y sus interesantes promociones.
Es por ello que nuestro equipo de diseñadores y edecanes se ha dado a la tarea de identificar el ciclo de vida de un volante, desde el momento en que te lo ofrece una edecán en la calle hasta que lo tiras amablemente a una jardinera metros más adelante.
1. Inicia su vida como la original idea del cliente “Rífate unos volantitos para la rosticería”
2. Sufre modificaciones constantes en su estado larvario antes de imprimirse: