El nuevo maratón sólo para profesionales
México.- Cada fin de año, el gen fiestero que todos los mexicanos llevan en el ADN comienza a alterarse ante la presencia de frío, fiestas y bonos navideños. Desde tiempos inmemoriales, el espíritu mexa ha levantado un puente que profetiza la “party” intensa y la ingesta de todo tipo de bebidas durante un periodo de 25 días.
A este puente se le ha llamado Guadalupe-Reyes, y es una tradición reconocida por la UNESCO, la SEP y el Club de Fans de José José. Se dice que comenzó hace setecientos y pico años como una tradición azteca, pero luego de la Conquista fue adaptado a los símbolos cristianos. Hoy, hasta tus tíos la aplican con su típica cubita libre en mano, señal de que ya es cosa del pasado.
Sin embargo, hace algunos años esta tradición entró en una lenta decadencia. Esto se debe a los millennials, quienes han inaugurado un nuevo tipo de puente que está causando conmoción por lo atrevido e innovador de su propuesta.
Se trata del Maratón Día de Muertos-Super Bowl
El plan es enfiestarse y no dejar de reventar la pista, tallar los tenis y armar el drink desde el 2 de Noviembre (o 31 de Octubre, para los más intensos) hasta el 4 de febrero del siguiente año, fecha en la que se lleva a cabo el Super Bowl.
Para vivir esta novedosa experiencia como se debe, expertos recomiendan armarse previamente con botana, adornos, celulares con pila, bocinas, unas playlists perronas, y una buena caja de Kraken para armar las cubas Kraken Ghost.
Estos especialistas, basados en un riguroso estudio de campo, detectaron, además, tres escalas para cumplir con esta peligrosa tarea:
1. “Algo Tranki”
Es para personas relajadas, cuyo único plan es seguir la fiesta sin caer en terrenos de peligro. Pueden sobrevivir este periodo fácilmente, sentados y con un drink inagotable entre los dedos.
2. “Somos hombres, no payasos”
Para verdaderos fiesteros pelo en pecho, barba remojada, dos semanas en pie, pomo Kraken en la mano, esta modalidad les permitirá sobrevivir al maratón cual surfista sobre su ola.
3. “Vámonos recios”
Para estos intrépidos exploradores de la conciencia, el único plan es perder toda noción de la realidad desde el día uno y descubrir si llegan con vida al Super Bowl.
