Para que se ruboricen esas pálidas mejillas darketas
Casa del Tío Chueco, Reino Aventura.- Agradecemos a los vendepatrias como Santa Anna cuando obtenemos beneficios de festejar fechas paganas y extranjeras como el Halloween. La fiesta de “espantos y disfraces” es una versión caricaturesca de lo que es el Día de Muertos, pero aceptémoslo: Nos encanta emborracharnos disfrazados.
Si bien muchos prefieren quedarse con la celebración de sus ancestros y picarse los ojos el 31 de octubre mientras los demás andan ahí de villamelones, hay grupos de mexicanos que han crecido mamando de la televisión gringa y para los cuales la “fiesta obscura” es un cotorreo más.
Para muchos este día, en el que la magia es posible, se convierte en un acercamiento amoroso-tenebroso con su enamorado/a (que también le es fiel a Satanás). Concientes de los múltiples intercambios fallidos que se realizan en este día, les dejamos una listita para que su encuentro sea todo menos escabroso:
1. Cigarro con moñito
2. Vinilo usado de Depeche Mode o The Cure que puedes comprar en metro Balderas
3. Gato negro que encontraste en el callejón (Estaría decente de tu parte si lo desparasitas y vacunas)
4. Nada más sangriento que la primera plana de un tabloide mexicano: