Para que hagas la Revolución pero también pagues tus impuestos
El Increíble Mundo del SAT.- Nuestros becarios más valientes y adictos a los deportes extremos se armaron de una cuerda, una lámpara y un equipo de supervivencia para sumergirse en una increíble aventura en el laberíntico portal del SAT (esa extraña página que sólo entienden los contadores).
Sucede que, hace un par de meses, entró en vigor la versión 3.3 de la factura. Esto quiere decir que las personas que por fin comprendían los extraños y enredados caminos del SAT, tendrán que empezar de nuevo, pues hay una nueva versión para facturar. A esta triste situación se le ha conocido como “La Hora SAT”.
La cuestión es que nuestros valientes becarios se internaron en una arriesgada aventura para, más o menos, saber cómo se tiene que facturar y bajo cuáles conceptos. Es así como llegaron a una extraña zona del sitio del SAT donde, en unos cuantos millones de palabras y cientos de documentos, se explica claramente cómo es el formato de las nuevas facturas. Y aquí viene lo escalofriante.
Nuestros becarios descargaron un documento Excel donde aparecen todos los conceptos por los que se puede facturar (catálogo que cualquier usuario que tenga toneladas de paciencia puede descargar). Y, luego de ver concepto por concepto, encontraron unas joyas que el sitio del SATánico (como se le conoce) escondía en sus entrañas del documento Excel. Vean nada más:
1. Si tienes un changarrito de guerrillas y mercenarios, ya puedes facturar bajo ese concepto:
2. Ahora que si lo tuyo es tener un negocito de guerras nucleares (¡espero que no, par favaaar!), igual puedes facturar:
3. Por si eres un pequeño emprendedor y revolucionario, ya puedes declarar en Hacienda el movimiento rebelde de tu preferencia:
4. Ah, y, por favor, los que administran las tarjetas de salario rosa o dan tortas y Frutsis, pasen a facturar:
5. O si vives en la Nueva España y tu negocio está relacionado con darle servicios al rey, no olvides hacer tu factura:
6. Y ahora, el que se lleva los aplausos: ¡Facturar por concepto de evasión fiscal! (Khá)
“En mi changarro ayudo a evadir impuestos, pero, eso sí, yo pago los míos”
Si bien es cierto que nuestros becarios apenas se encuentran en primer semestre de Contaduría, dejamos este hallazgo para que una persona más capacitada nos explique “keztapasanda”, o por lo menos nos dé unos tips para facturar nuestra próxima guerrilla sin ningún tipo de complicación.
¡Allahu Deforma!
