Al que también llaman Latin Grammys 2017
Las Vegas, Azcapotzalco.- Las ventas de discos compactos en nuestro país, seamos honestos, es casi nula, por lo que artistas que invierten sus carreras completas en la producción de un album se las ven verde para poder tener abundantes ganancias… a menos que venga en un compilado de lo mejor de la música que sucedió en el año, y si es reggaeton, mucho mejor, pues se venden mejor que el pan dulce, ¿verdad, Luis Fonsi?
Por eso mismo, la comisión de vendedores con bocinas en mochila del Metro de la CDMX ( o bocineros) decidió premiar a lo mejor que sucedió en el año en la escena musical, aquellos artistas que hicieron reventar sus bocinas a decibeles inaguantabales y que aún así lograron vender millones de copias.
El evento se realizó el pasado 16 de noviembre en las instalaciones de un almacén ubicado en el Estado de México, lejos del ruido de la ciudad y entrando a una calma mucho más rústica, el cual se decoró con el mejor lujo para recibir a las estrellas que alumbraron con su glamour la alfombra roja.
La curaduría que se realizó para las presentaciones en vivo se basó en los éxitos más perrones que caracterizaron al 2017, pues este año se convirtió en la punta de los hitazos para bailar a nivel internacional, algo que ni el mismo Psy del Gangnam Style puede superar.
La audiencia tuvo la fortuna de presenciar al latino número uno en las listas de música popular de todo el mundo, al ritmo de su “Des-pa-cito”: Ricky Martin Junior, o Luis Fonsi como le gusta que le llamen.
El evento también contó con la presencia de Steve Aoki, antes conocido como el Jesucristo asiático, acompañado de Bad “cabeza de concha” Bunny, otro llamado French Montana, y por último, el Maluma de pelo amarillo, J Balvin, interpretando todos juntos “Mi gente”, éxito que quiso ser el nuevo “Despacito” pero pues no.
Finalmente, el adorado de todos los productores de piratería mexicana y el “ay como que sí me lo daba un buen” de muchas mujeres, Maluma Pretty Bad Boy Beibi, con su éxito del verano 2017, “Felices los cuatro”, relato de una relación poliamorosa moderna.
Finalmente, se dio un after con un sonidero bien pesado en donde no se pudieron colar nuestros camarógrafos, pero sí nuestro corresponsal, a quien no hemos visto desde que terminó la fiesta. Beto, si estás leyendo esto, avísale a tu mamá que estás bien y mándanos unas fotos autografiadas de Steve Aoki, por fa.
