Esta poca habilidad del Canelo para hablar otro día contraviene la fama que tienen los deportistas para dominar los aspectos intelectuales de la vida, y tal vez estaríamos ante un caso aislado de poco dominio de los idiomas de parte de los atletas.
La cosa está tan caliente que hasta el mismo exmedallista de oro (obvio, estamos hablando de De la Hoya) aseguró que todo comenzó porque al Canelo no le gusta que quiten atención, y por eso comenzó todo.