Hace unas pocas horas se ha informado que unos piratas cibernéticos lograron hackear al bufete de abogados Grubman Shire Meiselas & Sacks y están pidiendo 21 millones de dólares para no revelar información de sus clientes.
Este despacho es uno de los más prestigiosos de Hollywood y representa a la crema y neta de la élite de las celebridades del espectáculo y el deporte. De hecho, el abogado Allen Grubman es considerado uno de los mejores y tiene entre sus clientes a Madonna, Lady Gaga y a Sir Elton John.
Otros que figuran en la lista son Barry Manilow, Barbara Streisand, Rod Stewart, Lil Nas X, Mike Tyson, Robert De Niro, Priyanka Chopra, The Weekend, Sofía Vergara, U2, LeBron James, Drake, Christina Aguilera, Nicki Minaj, Idina Menzel, Ella Mai, Bette Midler y muchos otros más.
Los hackers para probar que tienen es su poder más de 756 gigabytes de información
con los secretos de su listado de famosos han difundido el supuesto contrato de Madonna a través de las redes sociales. Esto para forzar al despacho a pagar la suma o si no sacarán a la luz pública lo que poseen (contratos, correos electrónicos personales y demás datos).De acuerdo a medios internacionales que están al tanto del asunto, el FBI ya está realizando una investigación exhaustiva y está trabajando con el bufete para poder solucionar pronto el problema y capturar a los responsables.
Por su parte, el despacho Grubman Shire Meiselas & Sacks ha confirmado que ya sus famosos clientes están enterados del asunto y aseguran que están trabajando las 24 horas para prevenir algún desastre de divulgación de su información personal.
Este golpe ha sido inusual ya que el despacho de abogados posee un excelente sistema de seguridad considerando el calibre de sus celebridades y la información tan sensible que llegan a compartir sus clientes.
INDESTRUCTIBLEMENTE REAL
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La respuesta diplomática ya surtió efectos