México.- Muchachos, se nos acaba el año, pero no por ello EL HUMOR. Mentira, ese se nos acabó hace ya un tiempo, pero le seguimos echando ganas con notas que te traigan una sonrisa. El día de hoy hablaremos de los intercambios, esos eventos horribles que salen bien cuando hay risas. En este caso, un fan de Rick y Morty.
Para quienes no conozcan qué es un Rick y Morty y con qué se come, les explico. Rick y Morty es una serie animada para clavados en la vida que creen estar deprimidos y no encontrar sentido a la vida, cuando en realidad solo están aburridos.
Al tener claro esto, hablemos de este niño de secundaria que les dejó el camino súper fácil a quienes pidieron un intercambio de tazas. Pasaron a preguntar de qué querían su taza (excelente idea, por cierto) y él dijo “quiero una taza de Rick y Morty).
¿Qué recibió? Una bellísima taza del sex symbol latino más espectacularmente apuesto, Ricky Martin.
Si no sabes qué es un Ricky Martin y con qué se come, ufff se come en uno de esos cuartos oscuros que… bueno, luego les cuento.
Muchos podrán juzgar a la persona que escuchó “Rickymory” y en su cabeza pensó “¿qué?”, porque seamos honestos, hay personas que parece que mastican las palabras cuando hablan, o que hablan muy bajito. Se ha demostrado que un mexicano preferiría envolverse en una sábana y tirarse por un barranco antes de decir: perdón, no te escuché, ¿qué dijiste?
Así que el cerebro hizo lo suyo, organizó los sonidos en palabras, las palabras en celebridades y órale, aquí tienen el resultado.
El muchacho se ve feliz. El internet también. Yo diría que ese intercambio fue el único en la historia de los intercambios que fue exitoso.
Al menos yo me voy con bastante satisfacción a mis vacaciones. Así que seguiré informando solo hasta el final del día. Compers.
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