México.- Radamés Sánchez, borracho alfa, muela de destapador, eructo de vikingo, caguamo banquetero, doctor en vinaterías, imitador de José José, burlador del alcoholímetro, calderonista honoris causa y devoto del bacacho, se propuso beber un shot de tequila por cada Joker que se encontrara en la calle.
Desafortunadamente, las consecuencias de dicho reto fueron casi mortales para el Radamés, y ahora se encuentra en un hospital del IMSS, en la sala de urgencias, donde los médicos luchan por salvarle su vida dándole unos toques-toques.
Y es que este valiente borrachín creyó divertido poner en riesgo su vida embriagándose con este peculiar juego. Sin embargo, no sabía que habría de toparse con cientos de personas disfrazadas del Joker apenas salieran de su casa.
“Este chavorruco ingirió aproximadamente ocho litros de tequila en menos de dos horas, su estado de salud es como unsuario en Twitter: sumamente delicado y extremadamente sensible”, explicó el médico que lo atendió.
Asimismo, el médico señaló que el Radamés entró en coma pocas horas después de ingresar al hospital. Según el testimonio de la enfermera, él mismo se indujo ese coma al no poder con tantos Bromas en la calle.
“No mamen, despiértenme cuando esta moda ya haya pasado… o cuando gane el Cruz Azul, lo que suceda primero, cambio y fuera”, concluyó Radamés desde la cama de un hospital y después cerró los ojos para entrar en proceso de hibernación.
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CAÓTICAMENTE REAL
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