México.- Una reciente investigación de la Universidad de Harvard, en colaboración el ICEL, reveló lo que ya todos los mexicanos sospechaban pero no muchos se atrevían a confesar. Este estudio arrojó que a todos, repito, a todos, sin excepción alguna, nos encanta el chisme.
“Es una sensación similar a la que experimenta el cerdo cuando se revuelca en lodo”, comentó el Dr. Sizu Yantra, “una sensación de bochorno, asco y absoluto placer se apodera del individuo al momento de detectar y hundirse en un chisme”, destacó.
De acuerdo con los resultados, todos los mexicanos poseemos por lo menos un 13% del gen PC (Paty Chapoy), el cual se activa ante el consumo de escándalos de la farándula, chanchullos en la política o simplemente entrometiéndose en la vida personal de vecinos, amigos y compañeros.
Para promover la aceptación de este comportamiento orgullosamente nacional, la Secretaría de Gobernación llevará a cabo un programa para que los mexicanos que se las dan de mamertos, payasos, nalga alzada, únicos y detergentes, acepten por fin su condición de chismosos.
“Se les entregará un ejemplar gratuito del TV Notas a la semana, así como una suscripción gratis al Deforma para que puedan consumir todo el chisme que deseen y aceptarse poco a poco, no todo son películas de Tarkovski que nadie entiende, chavos”, comentó la Secretaria Olga Sánchez Cordero en conferencia de prensa.
Por si cierto, si se quieren enterar de buenos chismes, pueden ver todo lo ocurrido entre Verónica Castro y Yolanda Andrade aquí y aquí. O bien, si lo prefiere, enterarse del chismazo de la semana con el Chef Benito de Masterchef aquí.
"Yo sabía que su nieto iba a ser grande entre los grandes", comentó Marco Antonio…
CONYUGALMENTE REAL
"AUSTERAMENTE" CIERTO
ENCIMADAMENTE REAL
"¿QUIÉN PIDIÓ MARIACHIS?" PERO CIERTO
DESCALABRADAMENTE REAL