Estrecho del Moroso.- Ante la insistencia de los ciudadanos deudores de no abrirle la puerta a los simpáticos notificadores y cobradores de Elektra, dicha empresa ha llegado a un acuerdo con varias sectas para que al mismo tiempo que llevan el mensaje del Dios, les cobren a los feligreses morosos.
“A nuestros notificadores ya no les abrían, por eso decidimos contratar a estos profesionales de los picaportes”, dio a conocer el dueño de Coppel.
La estrategia a seguir es simple: mientras las personas estén relajadas escuchando ‘la buena nueva’ que los Testigos de Jehová les están dando, uno de los trajeados le dará el aviso de cobro a pagar el lunes próximo.
“Yo estaba escuchando la palabra del Señor cuando uno de los hermanos se sacó una carta de la camisa y que me da dos días para pagar el microondas que saque hace tres años”, explicó Doña Chole, una de las primeras víctimas del nuevo método de cobro.
Muchos deudores han sido alertados del modus operandi en el que la desgraciada tienda les quiere cobrar, y ahora ya no le están abriendo ni a los carteros, no vaya a ser que traigan una orden de cobro entre el recibo del agua y el teléfono.
Por su parte, Elektra ya está entrenando palomas mensajeras en caso de que este plan emergente fracase, y tenga que notificar a sus deudores por las ventanas de sus casas donde se esconden, e incluso, están experimentando con dirigibles para encontrar a los deudores.
"Si así se ponen por unos bollos, no quiero ni pensar cuando instalemos Taco Bell…
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama