México.- Investigadores del Instituto Nacional de Chavorrucos revelaron que todos los individuos que desarrollen un vínculo emocional con un tupper se vuelven señoras o señores de inmediato. Esta metamorfosis ocurre justo en el momento en que las personas comienzan a sentir un extraño aprecio por los tuppers.
El proceso de señorización consiste en manifestar síntomas de inesperados de madurez, como no querer desvelarse en las fiestas, aprender a preparar un buen arroz, lavar el piso oyendo canciones de Selena y emocionarse al ver las ofertas de electrodomésticos en el supermercado.
El tupper es de los objetos con más valor emocional entre muchas personas, y el aprecio puede ser mayor al que se le tiene a otra persona: “en realidad, un tupper no guarda comida, sino que guarda el valor emocional que hemos depositado en él”
, comentó un experto.Este descubrimiento ocurrió cuando una joven de 18 años, por accidente, compró un tupper para guardar su sándwich (en lugar de guardarlo en una bolsita, como sus demás amigos); a las dos semanas, la joven ya sentía un gran amor por ese objeto, por lo que se transformó repentinamente en una señora de 45 años.
Por otro lado, algunos investigadores tienen la teoría de que, si un señor o señora dejan de tener tanto amor por sus tuppers, podrían recuperar la juventud que les fue arrebatada, aunque esta teoría es difícil de comprobarse pues no existe adulto en el mundo que haya decidido cortar el vínculo emocional con un tupper.
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VUELA ALTO, HÉROE
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CREEPY PERO CIERTO
"Yo sabía que su nieto iba a ser grande entre los grandes", comentó Marco Antonio…
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