Increíble pero cierto

Hasta en las mejores familias: Mamá paga por publicidad para conseguirle novio a su hija

Que alguien le diga cómo abrir una cuenta en Tinder

Esquina de los clasificados.- Una mujer contrató un espacio en Times Square de Nueva York para ver si le conseguía un novio a su hija, y pues en una de esas funciona mejor que Facebook Parejas.

Pero, espérense, no juzguen aún a la mamá de la chica. Resulta que la señora de nombre Beth Davies tiene 62 años, y ha luchado contra el cáncer desde 2004, y ahora le han informado que la enfermedad ha hecho metástasis por lo que le han dado poco tiempo de vida, de ahí que ella esté haciendo todo lo posible por ver casarse a su hija con un buen hombre.

El deseo de la mujer para su hija Molly es tan grande que contrató un anuncio en una de estas pantallas gigantes que hay en el corazón de Manhattan en el que salía una foto de su hija al tiempo que decía que estaba buscando un hombre para ella.

“Yo soy la casamentera de Molly y su mama”, decía el anuncio además de poner en el anuncio una dirección para entrar al perfil de su hija en la app Wingman.

La publicidad ya ha sido vista por miles de personas

El anuncio en lugar de molestar a la chica, se le hizo de lo más lindo, sobre todo porque la intención de su convaleciente madre es asegurarse que alguien cuidará de ella cuando ya no esté.

La misma Beth explicó que actualmente está en tratamiento con un medicamento experimental con el que espera controlar el cáncer de perdida un par de años, tiempo en el que ella tiene la esperanza de ver a su hija siendo desposada.

“Dejé que mi mamá se divierta al filtrar los perfiles y las respuestas. Valoro una relación como la de mis padres, donde ellos hablan de las cosas y buscan altos grados de amabilidad”, explicó Molly al enterarse del mega anuncio.

El anuncio fue contratado gracias a la ayuda de la fundadora de la plataforma Wingman, quien supo la condición de la madre, y quien está ayudando para en efecto, conseguirle un buen partido a la chica que al parecer nunca ha intentado sentarse sola en un bar.

 

Y por si no la viste: una doñita mojó a unas chicas que estaban afuera de su casa que “porque la banqueta es su propiedad”.

Adolfo Santino