Increíble pero cierto

Clásico que haces un caldito de guajolote y te terminan multando por “brujería”

Cuando se estaba comiendo el caldo no sintió la “brujería”

Fogón del caldo tlalpeño.- Unas mujeres fueron acusadas de brujería luego de que un caldo de guajolote que prepararon le hiciera daño a un sujeto que se lo comió.

Esto sucedió en Tuxtla Gutiérrez (en Chiapas, por si nunca fueron muy bueno en geografía), en donde un sujeto de nombre Guadalupe (por si no conocían los nombres neutros), evangélico y perteneciente a la comunidad tzotzil, acusó a su madre y hermana de haberle hecho brujería con un caldo que le cayó mal.

Hasta ahí todo sería risas, el problema es que las mujeres realmente fueron juzgadas por los pobladores de Cuchulumtic en Chamula quienes impusieron en asamblea una multa de 200 mil pesos a las acusadas, haciendo que todos nos sintamos satisfechos por los “usos y costumbres”.

Las mujeres habrían sido acusadas ya que según el denunciante “al caldo le pusieron animales como lombrices, babosas, gallinas con defectos o enfermas y algunas hierbas; los molió y los puso en su caldo de guajolote para hacerle mal, pero al saber si eso es brujería”.

El afectado explicaría que después de comer el caldo: “Me puse como loco, nervioso. La gente dijo que no pueden hacer eso. La mujer conoce la palabra de Dios. Quién sabe cómo se le metió el Diablo en su corazón”.

Entre las mujeres y el sujeto hay un pleito por una herencia, de ahí que la asamblea determinara que las mujeres tenían un “motivo”, lo que no explica por qué el troglodita sí se tragó el caldo de sus “enemigas”.

“Él la está presionado para que le entregue parte de la tierra y del dinero que tiene. Ese es el pleito. Ella, que es una mujer separada, tiene terrenos y dinero”, explicó el abogado del sujeto sin Alka Seltzer.

Adolfo Santino