Cubículo de las rutinas malditas.- Un sujeto decidió demandar a la empresa en la que trabajaba porque “estaba muy aburrido ahí” y ahora es millonario.
Fréderic Desnard trabajaba para la empresa Interparfums (que evidentemente hace perfumes, ya que esta es la actividad que más genera el PIB en el país galo). Sin embargo, hace 6 años sufrió un ataque de epilepsia cuando conducía su auto, lo que lo obligó a incapacitarse por 6 meses (igual que tu compañera de trabajo que faltó todo el año por una uña enterrada), causando que lo despidieran de su puesto.
Desnard aprovechó el despido injustificado para culpar a su antiguo lugar de trabajo precisamente por haberle causado la enfermedad, ya que según dijo “hacía muy poco y tenía muy pocas responsabilidades”.
Durante la demanda incluso argumentó que “nadie lo regañaba si llegaba tarde”, causándole un aburrimiento crónico que según dijo, le acarrea la epilepsia, situación clínica que habría que revisar pero que de antemano sirvió que que el tribunal fallara a su favor.
Así las cosas, la justicia francesa falló a su favor condenando a la empresa al pago de 50 mil euros (que traducidos a valor cacao son más de millón 200 mil pesos), por haberle causado una depresión grave y no haberle dado responsabilidades acorde a su puesto, causándole epilepsia permanente.
La historia fue dada a conocer por el propio demandante a la revista Newsweek, y al parecer la empresa ya ha tomado medidas internas para que sus empleados no tengan “ventanas” de aburrimiento, gracias a la demanda de este sujeto.
"AUSTERAMENTE" CIERTO
ENCIMADAMENTE REAL
"¿QUIÉN PIDIÓ MARIACHIS?" PERO CIERTO
DESCALABRADAMENTE REAL
"Creo que fuimos un poco duro contigo", le dijeron los mexicanos a Adal
ACAPARADAMENTE REAL