Colonia Roma.- La Oficina de Patentes a cargo del inventor Ciro Peraloca resolverá de una vez por todas si Italia o México pueden celebrar este 24 de febrero el día de la bandera, tras varios siglos de conflicto.
Ambos países se han demandado mutuamente debido a la disposición de colores en su lábaro patrio toda vez que las dos naciones alegan tener los derechos de autor sobre él.
La resolución que emita este comité internacional será inapelable y la nación que resulte perjudicada tendrá que cambiar los colores en su bandera, y de paso, la forma en cómo hablan.
“Noi habiamo stato primo”, alegó el primer ministro italiano mientras colocaba su mano en forma de reclamo.
México por su parte, mandará a una delegación para exponer sus alegatos finales en los que sugieren que Italia les copió el diseño junto con el nombre de “Benito” causando así un agravio tanto al medallero de los Juegos Olímpicos
como al legado del bomberito.“Esos colores son míos. ¡Devuélvemelos!”, expuso el funcionario mexicano.
“¡Oblígame!”, replicó el ítalo iniciando así un aquelarre en el piso de la Asamblea General de la ONU.
Se espera que todo termine por resolverse en un partido de fútbol entre las selecciones de ambos países, lo que ya puede anticiparse como un partido ratonero de 0-0 que se definirá con penales volados por parte de Andrés Guardado.
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COLONIZADORAMENTE CIERTO
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ESPLÉNDIDAMENTE REAL
MADURAMENTE REAL