Querétaro, Tierra de Anaya.- Los tigres son animales en peligro de extinción reservados para vivir libres en la selva, en la casa de un narco y como mascotas de equipos, digamos medianos, del futbol mexicano… pero que yo recuerde no deberían estar perdidos en un vecindario residencial de Juriquilla, Querétaro. Menos un cachorro de tigre blanco:
Resulta que vecinos de Juriquilla, Querétaro (¡no Juriquilla, Jalisco la de la famosa virgen, eh!) reportaron el avistamento de un pequeño tigre blanco paseándose por las calles la mañana de este miércoles, según informó la Coordinación de Protección Civil de Estado, Gabriel Bastarrachea.
Según el funcionario, se activó un protocolo para capturar y resguardar al tigre blanco, pero a su llegada fue encontrado ya en custodia de la propietaria, quien además se identificó como su dueña.
Pues según informó el funcionario Bastarrachea, eso lo tiene que investigar la Profepa, institución que tiene identificados los puntos de adquisición de especies exóticas. Además de que también se dijo que la dueña tenía los papeles correctos, de acuerdo a lo que pudieron determinar.
Como le reportamos aquí mismo, la semana pasada se perdió un tigre por las calles de Guadalajara pero igualmente fue capturado por sus dueños… y un ¿charro?. Efectivamente, un hombre llegó y lo lazó para regresarlo a su cautiverio:
Se ve que ni las autoridades ni la gente ha visto la serie de Netflix, Tiger King, donde un señor tiene muchos tigres, pero en condiciones deplorables que conducen a que un felino le arranque la mano a un cuidador.
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