Miami – La muerte de José José destapó una cloaca de drama que nadie puede ni quiere cerrar porque el chisme es más adictivo que la coca. El más reciente capítulo de esta saga (más larga que Naruto) tiene que ver con las acusaciones hacia Sarita Sosa de serle infiel a su marido Yimmy Ortiz con su cuñado, Didier Ortiz.
Así como lo leen. Sarita, la protagonista de una dramática cacería de brujas luego del escándalo por el paradero del cuerpo de su padre José José, ahora es acusada de ponerle el cuerno a su marido con este man:
De acuerdo con cierta famosa revista de espectáculos, una ex-empleada de confianza que prefirió el anonimato, pero que pudiera o no ser Raquel Bigorra, reveló que Sarita está teniendo ondas con su cuñado, quien, por si fuera poco, también es su guardaespaldas. De telenovela este pedo.
Supuestamente, todo el odio y linchamiento mediático que se desató contra Sarita le despertaron un delirio de persecución. Sentía que Marysol y José Joel habían ordenado mantenerla vigilada y vivía en una paranoia constante. Si a eso se le suma el ataque de la prensa que la acecha (acechamos) como buitres por cada paso que da, pues es normal que pidiera un guardaespaldas. Y ese guardaespaldas llegó a su vida en forma de Didier Ortiz.
Empezaron a pasar mucho tiempo solos y ¡traz!, que pasan los mínimos. Según la publicación, Sarita Sosa incluso se fue de vacaciones con Didier luego de la muerte de su padre, lo cual no confirma nada pero tampoco lo niega, así que nos dejaremos ir como hilo de media especulando.
También se dice que este amor prohibido se da durante las noches. Cuando Sarita sale a cantar en bares, ambos aprovechan para darle rienda suelta a la pasión. Obviamente nada de esto está confirmado pero hey, eso nunca ha detenido a nadie para disfrutar de un buen chisme.
O sea, para lo que sabemos bien podrían hasta tener una relación poliamorosa y todos viven contentos así. Ya es 2019, cosas más raras se han visto.
"Si así se ponen por unos bollos, no quiero ni pensar cuando instalemos Taco Bell…
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama