Camelot.- Una mujer demandó a la aerolínea TUI por haberle colocada a “un pasajero obseso” al lado de ella.
Margaret, es el nombre de la dulce viejita de 75 años, quien está disfrutando de sus años de retiro gozando cada instante de la vida sin buscar problemas de a gratis, sólo que en esta ocasión no pudo evitar molestarse porque le robaron el respaldo de la mano en el avión.
“Sí, me ofrecieron cambiarme de lugar, pero ¿por qué habría de cambiarme? Estoy viajando para celebrar con mi esposo nuestro 55 aniversario, por qué he de estar 11 horas separado de él?”, preguntó retóricamente la mujer, quien al parecer el es alma de las fiestas y cuando falte su presencia será muy extrañada.
Esta adorable mujer pagó junto con su esposo, un desafortunado varón de nombre William Burton, casi 2 mil euros para viajar a Puerto Vallarta desde Londres, lugar de las endodoncias voluntarias.
Al llegar a su destino, preguntaron a la aerolínea si en el vuelo de regreso, les tocaría otra vez junto al pasajero con sobrepeso, y al confirmarles que en efecto, le tocaría chutarse el regreso igual, pagó 90 euros extras para que “la subieran de categoría”.
Según la agradable mujer, “ella pagó 2 mil british pounds por viajar cómoda, y ahora siente que sus vacaciones están comprometidas, pues su vuelo fue incómodo y con dolor, por lo que procederá a demandar a TUI por el reembolso de su viaje, o de pérdida una disculpa porque le dieron 2/3 partes de su asiento”.
Sí, al parecer los problemas del primer mundo son irrisorios y vivir en un país donde Alemania te derrota en cada ocasión y tienes que pedir ayuda para que te salven, puede ser frustrante.
INDESTRUCTIBLEMENTE REAL
DEGRADADAMENTE CIERTO
SEPARADAMENTE REAL
Nada como pasarla el 24 en bata evitando el estrés familiar
El pasar dos horas buscando estacionamiento es el primero paso para la canonización
La respuesta diplomática ya surtió efectos