Increíble pero cierto

Clásico que le robas a mamá Lucha en una protesta, pero te gana la culpa y mejor se lo devuelves

San Juanico, fuente inagotable de bondad

Adelantito de Indios Verdes – Ya son más de 15 horas las que lleva el bloqueo de la carretera México-Pachuca, que iniciaron  los pobladores de el nada seguro o pintoresco barrio de San Juanico (recordado por muchos por sus explosivas fiesta), por ahí, adelantito de Indios Verdes, donde las luces ya no tocan la tierra y desde luego a donde jamás debes ir, Simba.

Los nativos acusan la desaparición de sus familiares, golpes por parte de las autoridades y abusos, algo que no es exclusivo del lugar pero que ya los tiene hartos y como en el territorio nacional no hay ley, pues lo único que queda es tomar las carreteras, hacer un revuelo y hacerte escuchar.

Durante estos bloqueos, fue registrado un saqueo a un super que tienen por ahí, y en donde los medios decían que los vecinos del lugar se llevaban teles, celulares, juguetes y consolas de videojuegos, ya sabes, artículos de primera necesidad, sin contar con que el pueblo se volvería a levantar en armas para  limpiar su nombre.

El barrio, siempre fiel, se organizó mucho mejor que cualquier cuartel y correteó (ademas de zapear) a unos cuantos raterillos enmascarados a quienes por cierto señalaron como extraños, pues nadie de la tribu los reconoció. Les quitaron los artículos de la pobrecita tienda y abrieron las puertas del primer mundo.

Tal como si se tratara de una marcha del 2 de octubre, consignas como “¡San Juanico no es ratero, San Juanico no es ratero!” llenaban los corazones de los vecinos con honor. El gerente de la tienda salió a recibirlos y cual si se tratara de los Reyes Magos, fueron recibidos por una puertita para que entregaran los artículos.

Así es, amigo, este lugar no es el primero que se te viene a la mente cuando piensas en algo lindo y seguro a las 3 de la mañana, pero nos ha dado una gran lección además de ser la prueba de que en todo lados existe la honestidad. San Juanico, fuente inagotable de bondad.

 

 

 

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