Charlie y la Fábrica de Chocolate.- Es muy común que hoy en día las marcas tengan la brillante idea de emplear a personalidades del Internet como “talento creativo”. Nos referimos a los influencers, quienes resultan tan buenos para las campañas publicitarias como un padrecito haciéndola de niñero.
Esta vez, la vida nos demostró que hasta las mejores cosas pueden tener un lado detestable. Nos referimos al chocolate, bajón por excelencia y culpable de tu felicidad y de tu depresión por el sobrepeso.
Pues en esta ocasión, Hershey’s nos dio una master class de qué NO hacer en tu estrategia de Marketing Digital. ¿Qué mejor que un montoncito de influencers, unas cuantas personas en situación de calle (o de bajos recursos) y unos ricos chocolatitos? Justo eso fue lo que pensaron los encargados de hacer esta aberrante campaña comandado por el hashtag #HacerElBienSabeBien
Y es que al parecer las preguntas en la junta creativa que derivaron en este solemne acto de clasismo fueron una verdadera muestra de brillantez (not). ¿Qué mejor que darle un chingo de varo a unos vatos para “ayudar” a personas necesitadas con una lechita de chocolate? Pues obvio, ni que fueran ONG para andarlos ayudando de verdad:
El Internet no les perdonó esta metida de pata y en seguida tachó a la marca (y la campaña) de clasistas y racistas (y sí). Los usuarios de redes sociales, principalmente los de Twitter, mostraron su total desacuerdo ante lo mostrado en dichas fotos.
Mientras algunos se indignaban y preparaban antorchas para quemar vivo al Willy Wonka versión Hershey, otros más recriminaban la acción con memes para aligerar el momento.
Después de ver la reacción de los usuarios, Hershey’s salió como el perro arrepentido, con el hocico partido y con el rabo entre las patas para pedir una disculpa después de su incidente. Aunque cabe aclarar que estos carnales no entendieron nadita, pues pidieron disculpas con una cuenta creada en el 2016 con un sólo follower y un sólo tuit (a menos que sea fake):
Desde El Deforma nos promulgamos en contra de cualquier acto de supresión racial por parte de los colonizadores de la blanquitud estandarizada. Nos negamos a responder con sonrisas sus actitudes sombrías.
Dejemos de ser siervos en esta tienda de raya, reformulemos las defensas ante la ignominia producida por las grandes esferas del poder encarnado en porciones de leche, cocoa y almendras.
No seas como esos influencers. Te quiere, el Tío Deforma.
"Si así se ponen por unos bollos, no quiero ni pensar cuando instalemos Taco Bell…
DESESPERADAMENTE REAL
COLONIZADORAMENTE CIERTO
Además de cena en casa ajena, conocerán a las sobrinas del patrón
Lo usaron de medio de transporte hasta el valle que la nieve cubrió
"¿Cómo vas, ma'? ¿Ya hay buñuelos?", preguntó un chavo todavía en pijama