Coto Tepoztlán.- El senador Gerardo Fernández Noroña creyó que sería buena idea dar una plática en la Universidad de Guanajuato, pero a los estudiantes no les pareció tan buena idea y terminaron corriéndolo.
El encontronazo se dio durante el Tercer Encuentro Nacional Estudiantil de Ciencia Política en la universidad guanajuatense, cuando el mesurado legislador ya se disponía a hablar sobre austeridad y pagos de recibos del predial, y en eso un grupo de estudiantes comenzó a manifestarse.
Al grito de “¡Fuera!, ¡fuera!” y “¡Que se baje!, ¡que se baje!”, Noroña fue recibido mientras él acusaba que “un pequeñísimo grupo vino con la intención de reventar la asamblea”, mismo que se fue haciendo cada vez más nutrido mientras más trataba de deslegitimarlo.
Para tratar de calmar los ánimos, el senador, que ha pasado por al menos cuatro partidos políticos, sentenció que los estudiantes “ya se parecen a las bancadas del PRI y el PAN, ‘reventadores’, que no aguantan argumentos, que no aguantan razones, que no aguantan una reflexión seria”, argumento que sirvió de la misma manera que la gasolina sirve para controlar incendios.
De igual manera, Gerardo etiquetó a los estudiantes que se estaban manifestando de “porros y reventadores”, creando un bucle en el universo con consecuencias todavía reservadas.
“No puede ser que la mayoría de la gente esté escuchando y que interrumpan, que se suban al presídium, que les den la palabra y que les permitan reventar la asamblea. Esa no es la manera correcta de conducirse”,
añadió finalmente antes de salirse del lugar y de aventar un grito plañidero al cielo: “¡Me da igual!”.
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"Le juro que justo hoy me dio gripa, jefe"
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